El e-commerce B2C a nivel mundial ascendió a 1.7 billones de dólares en el 2015, y se prevé una cifra de 1.9 billones para el 2016. El comercio en línea ha tenido un ascenso vertiginoso y las redes sociales han sido uno de los canales para llegar a potenciales consumidores. Sin embargo, no siempre son aprovechadas de manera óptima, es importante entender que pueden ser un medio de comunicación, un generador de engagement y una plataforma de atención al cliente. Pero sobre todo, una herramienta para conectar con tus compradores.
Redes sociales como Facebook y Pinterest son apropiadas para publicar el catálogo de productos y servicios que tienes en tu web. Además, la interacción con otros usuarios es mucho más cómoda que en sitios como Twitter. Claro está que son de carácter distinto. Pero Facebook, a diferencia de Pinterest y de cualquier otra red social, te permite promocionar un sitio web con presupuestos diarios de 1 dólar en adelante, y escoger a quienes quieres llegar mediante un filtro de género, edades, intereses y ubicación. Este tipo de promoción envía cualquier clic en el anuncio a tu página web. Un estudio realizado por Shareaholic en el 2014, reveló que el 24.63% del total del tráfico en sitios web, proviene de Facebook, seguido de Pinterest con un 5.06% y Tiwtter con 0.82%.
Facebook, Pinterest y Twitter son recursos que no implican una mayor inversión que otros canales de Marketing online y offline, y un punto de partida que puede acabar en una venta. La estrategia del Social Media debe ir enfocada en generar tráfico, aumentar el tamaño de seguidores y conservar el posicionamiento de tu marca. Cualquier objetivo debe estar basado en el tipo de negocio que tengas. Existen redes sociales en las que una compañía de servicios no tiene el mismo impacto que una de bienes, y su visibilidad dependerá de cuál sea la estrategia usada para hacer presencia en una determinada red.