Cuando se juntan una mente inteligente, con visión de futuro y un detonante, es casi seguro que saldrá un gran negocio. Algo parecido le ocurrió al creador de Netflix. Cuenta la leyenda que la multa que le puso el videoclub por devolver tarde una película fue el detonante del nacimiento de Netflix. Realmente más que la multa fue el inconveniente de tener que hacer varios transbordos para devolverla lo que le llevó a pensar que tenía que haber alguna forma diferente de hacer las cosas. ¿Cuál? que las películas, en el formato que fuera, pudieran alquilarse por correo.
Él y su socio, Marc Randolph comenzaron su negocio en 1998, con un catálogo de 1.000 títulos con una novedad muy importante en aquel momento: el usuario podía devolver la película hasta una semana después, mientras los videoclubs daban un margen de 24-48 horas.
El siguiente paso era casi lógico: ampliar más el tiempo que el usuario pudiera tener la película en su poder, a cambio de una suscripción económica que no pasaba de los 20 euros. Nuevamente tuvieron una gran idea, que básicamente se basaba en ponerse en el lugar del cliente. Alquilar una película, un momento de disfrute, no puede convertirse en algo estresante, tener que devolverla apenas 24 horas después. Lo suyo es disponer de ella unos días y verla cuando apetezca. Algo en lo que no habían caído los videoclubs, más preocupados por alquilar las películas cuantas más veces mejor y castigar a los impuntuales.
A pesar de haber creado una marca, una manera diferente de plantearse el negocio, tenían pérdidas, por lo que en el año 2000 propusieron a Blockbuster una alianza empresarial que el gigante rechazó. Siguieron con sus planes, trabajando duro y en 2002 Netflix cotizaba en bolsa. Solo tres años después tenía 4,2 millones de suscriptores. En 2007 la empresa toma una decisión arriesgada, pasarse al formato digital, el streaming, en el que competía con empresas como Apple o Amazon. Fue un paso de gigante ya que no necesitaba soporte físico para difundir contenidos.
En 2010, justo cuando Blockbuster se declaraba en bancarrota, Netflix comenzó su expansión internacional en Canadá. Desde 2017 año está disponible en todo el mundo. En 2013 se atrevió con su propia serie, House of Cards en 2013 y su primera película en 2015, Beasts of no Nation. Hoy tiene más de 100 millones de suscriptores.
Conocimiento, resolución de un inconveniente, constancia, saber entender qué necesitan los usuarios y tomar decisiones para adaptarse a los cambios, son las claves del éxito de un gran negocio que ha ido evolucionando tan rápidamente como la propia industria de los contenidos.